El 33,9% de los usuarios de Internet descubre nuevas marcas, productos y servicios a través de los motores de búsqueda, de acuerdo al Informe Digital 2021 España. Como negocio, resulta vital aparecer en los resultados que estos motores ofrecen a sus usuarios cuando acuden a ellos en busca de información.
Para ello, contamos con una estrategia de Marketing Digital clave que toda empresa debería conocer. Hablamos del SEM y en este artículo te explicamos en qué consiste y cuáles son sus principales ventajas.
¿Qué es el SEM?
Si nos ceñimos a la etimología, las siglas de SEM hacen referencia a Search Engine Marketing y abarcan cualquier estrategia destinada a generar visibilidad para una empresa en buscadores, ya sea pagada u orgánica. El objetivo es lograr que una empresa aparezca clasificada en las posiciones destacadas del buscador cuando un usuario realice una búsqueda utilizando términos de interés comercial para el negocio.
Sin embargo, en la práctica el SEM hace referencia en exclusiva a la técnica cuyo objetivo es promocionar una empresa en un motor de búsquedas a través de anuncios de pago (Ads). Generalmente estos resultados patrocinados se muestran en la parte superior y en el lateral de las páginas de clasificación, conocidas como SERPs. Por este motivo, al SEM también se le conoce como PPC (pago por clic).
Cuando el objetivo es lograr ese posicionamiento en buscadores de forma orgánica, es decir, sin pagar al motor por aparecer en sus anuncios, la técnica cambia de nombre y pasa a denominarse SEO (Search Engine Optimization).
Cabe añadir que en España el principal motor de búsquedas es Google, que lidera el ranking con una cuota de mercado del 96%. Por detrás en la clasificación nacional se sitúan Bing, el motor de búsquedas de Microsoft, con un 2,73% y Yahoo con un 0,64%.
¿Cómo funciona el SEM?
Para conquistar las posiciones de pago en buscadores como Google, el SEM utiliza un sistema de pujas por palabras clave. Así, cuando un usuario teclea determinadas consultas sobre productos o servicios de interés para el negocio, el buscador ofrece a las empresas la posibilidad de comprar un espacio publicitario para que sus anuncios aparezcan junto a los resultados orgánicos.
La dinámica del SEM es sencilla. El anunciante indica el CPC (coste medio por clic) máximo que está dispuesto a pagar al buscador por un clic del usuario en su anuncio y entra en el sistema de pujas con otros negocios.
Cuando el usuario realiza una búsqueda utilizando cualquiera de las palabras clave o frases por las que el anunciante está pujando, se activa la publicidad. Estos anuncios se clasifican siguiendo diferentes criterios como la calidad del anuncio o la cantidad de puja, y la empresa únicamente pagará al buscador si el usuario llega a hacer clic en el anuncio.
De esta manera, el SEM brinda a las empresas la oportunidad de mostrar sus anuncios ante potenciales clientes cualificados para la compra justo en el preciso instante en el que tienen interés en la transacción. No obstante, esta no es la única ventaja del SEM. Las repasamos a continuación, no sin antes ahondar en la diferencia entre SEO y SEM.
¿En qué se diferencia el SEO del SEM?
Como hemos visto, tanto el SEM como el SEO son dos estrategias que buscan mejorar la visibilidad de un negocio en los buscadores. El SEM lo hace pagando a los motores por aparecer en los espacios reservados para publicidad y el SEO lo consigue de forma orgánica.
Para ello, los expertos en SEO se esfuerzan en descifrar el algoritmo de Google, que tiene en cuenta más de 200 factores de posicionamiento. A través de una serie de prácticas de optimización on page y off page, el SEO consigue clasificar un sitio web entre los primeros resultados orgánicos del buscador y aumentar así la cantidad de visitas (tráfico) que recibe un negocio.
Ambas estrategias (SEO y SEM) no son excluyentes, sino complementarias. Por ello, es necesario contemplarlas en igualdad dentro de una estrategia de Marketing Digital. Por un lado, el SEO ayuda a reforzar la autoridad y la reputación de la marca en Internet captando tráfico de forma continuada. Por su parte, el SEM permite obtener resultados rentables de una forma más rápida.
Ventajas del SEM como estrategia de Marketing Digital
El SEM ayuda a aumentar el número de conversiones cuando el usuario se encuentra en la parte final del embudo de ventas. Esta sería, sin duda, su principal ventaja. Aunque, más allá de aumentar las ventas, esta estrategia de posicionamiento ofrece otros beneficios a las empresas que deciden apostar por ella:
- Resultados a corto plazo dado que permite captar tráfico, es decir, clientes potenciales para el negocio de forma inmediata.
- Anuncios dirigidos a través de la segmentación del consumidor de acuerdo a diferentes criterios (ubicación, idioma, sexo, intereses de búsqueda…). A través del SEM podemos conseguir que los anuncios tan solo aparezcan ante clientes potenciales con interés de compra aumentando la eficacia de la estrategia.
- El SEM genera un ROI más alto en comparación con otros tipos de publicidad como la tradicional, ya que impacta directamente sobre la audiencia interesada en el negocio y solo se paga cuando el usuario realiza clic en el anuncio.
- Los anuncios de Google permiten a las empresas exponerse en el buscador mejorando la visibilidad del negocio en el entorno digital, aumentando el conocimiento de marca y ofreciendo una ventaja competitiva.
- Es una estrategia al alcance de todo tipo de presupuestos permitiendo al anunciante decidir cuánto quiere invertir cada día y qué cantidad desea pagar por cada clic. Además, gracias a las herramientas de analítica es posible monitorizar campañas, medir las conversiones y hacer ajustes en tiempo real para optimizar la inversión.
El SEM es una estrategia destacada para el Marketing Digital actual, junto a otras que te pueden ayudar a vender como por ejemplo, las Redes Sociales, el E-mail Marketing o el SEO. Si tu empresa quiere abrirse paso en el entorno online con éxito, es indispensable tenerla en cuenta. Por ello, desde el MBA de la Cámara de Valencia se hace especial énfasis en el aprendizaje y aplicación práctica de este tipo de estrategias en determinadas asignaturas y de forma especial en el proyecto de creación de empresa.