Vivimos en un mundo cada día más complejo, que exige profesionales altamente cualificados para abordar los desafíos presentes y futuros con eficacia y desempeño. La digitalización, la innovación como elemento de diferenciación, el mercado global y altamente competitivo, los hábitos de consumo cambiantes, el complicado panorama geopolítico o la actual crisis sanitaria mundial son factores que inciden directamente en el desarrollo empresarial.
Ante esta realidad, el mercado laboral debe adaptarse constantemente y dominar ciertas habilidades profesionales implica aumentar las probabilidades de éxito a la hora de acceder a un puesto de trabajo. En este artículo revisamos cuáles son las 6 habilidades profesionales más demandadas en la actualidad por parte de las empresas.
1. Analítica
Una persona con altas capacidades analíticas ofrece un gran valor en la actualidad. La habilidad para comprender y analizar un problema o coyuntura y tomar una decisión en consecuencia accionando las estrategias adecuadas para solventar esa situación permite un mejor desempeño laboral y ayuda a la empresa a alcanzar los objetivos de negocio marcados.
Parte de esta habilidad para el análisis se concentra en tareas de observación, investigación, detección de patrones, interpretación de datos, integración de nuevas informaciones y toma de decisiones fundamentadas en múltiples factores.
2. Gestión de personas
La gestión de personas implica el control de habilidades duras y blandas (soft skills). Las primeras hacen referencia a las capacidades para realizar una tarea específica incluyendo conocimiento especializado y habilidades técnicas.
Respecto a las habilidades blandas, son las relacionadas con el comportamiento, la forma de razonar, las habilidades cognitivas y la personalidad. En otras palabras, se refieren a cómo las personas se adaptan a nuevas situaciones, colaboran con su entorno, afrontan los problemas y toman decisiones.
Las habilidades sólidas para gestionar personas ayudan a construir y fortalecer las relaciones en el entorno laboral y a mantener al equipo de trabajo unido y motivado, comprendiendo sus necesidades individuales y ayudándoles a alcanzar sus objetivos. Un profesional hábil para liderar y gestionar a personas debe saber cómo lidiar con el estrés, empatizar con las personas que le rodean y comunicarse de una forma clara y honesta desarrollando la inteligencia emocional.
3. Creatividad
Al inicio del artículo hemos definido la complejidad del panorama socioeconómico actual. En esta es imperante desarrollar la habilidad profesional de la creatividad. El mercado demanda profesionales creativos capaces de idear nuevas formas de realizar tareas, enfrentar retos y resolver problemas. Nuevas formas de pensar que potencien en las empresas un cambio de rumbo hacia acciones más rentables, productivas y eficientes.
4. Trabajo en equipo
La colaboración es una habilidad profesional extremadamente importante en el mundo actual. Trabajar en equipo e interactuar con otros compañeros ayuda a aumentar su eficacia y rendimiento.
La base del trabajo colaborativo en equipo está conformada por la confianza y la comunicación. Ser capaz de comprender y respetar los diferentes puntos de vista, así como gestionar las prioridades comunes del equipo encontrando ese equilibrio con el logro personal son habilidades que las empresas valoran en sus empleados. En definitiva, se trata de construir relaciones de trabajo positivas en pro del beneficio común que conduzca a conquistar las metas de negocio.
5. Adaptabilidad
El mercado cambia cada día al calor de los nuevos patrones de consumo y la implantación de las nuevas tecnologías. Por ello, requiere profesionales con capacidad para adaptarse, que estén preparados para adoptar nuevos procesos y enfoques que permitan a las empresas continuar siendo competitivas en entornos complejos.
Un profesional que se adapta es capaz de cambiar para alcanzar el éxito. Debe estar preparado para manejar situaciones excepcionales en las que no hay un plan de ruta trazado ni unos procedimientos claros. En este contexto, debe aprender con rapidez, demostrar resiliencia y confiar en su juicio para tomar decisiones estratégicas que no siempre son fáciles.
6. Competencias digitales
Las Tecnologías de la Información, el Big Data o la Inteligencia Artificial han influenciado en los hábitos de compra de los consumidores y, por ende, en la forma de hacer negocios. Los profesionales del siglo XXI deben contar con una alta alfabetización digital entre sus habilidades para manejarse en el entorno actual.
Más allá de controlar los principales softwares de ofimática las empresas buscan personal que sepa manejarse con soltura y resolución en un entorno de trabajo digitalizado. Esta habilidad resulta básica en la coyuntura actual en la que el teletrabajo se ha afianzado como una modalidad laboral necesaria, para la cual resulta clave el uso de las TICs.
7. Actualización de conocimientos
En la actualidad hay miles de profesionales ocupando empleos que ni siquiera existían hace poco más de una década como el caso de los analistas de Big Data, los gestores de innovación, los pilotos de drones, los especialistas en eCommerce, los nanomédicos, los diseñadores UX o los gestores cloud. La actualización de conocimientos a través de la formación constante a lo largo de la vida es una habilidad profesional imprescindible para contar con un perfil competitivo en el mercado de trabajo actual.
De hecho, cada vez son más las empresas que ponen en marcha programas formativos a nivel interno para que las competencias de sus empleados no se queden obsoletas y puedan continuar ofreciendo todo su potencial dentro de la entidad.
Más allá de la formación en el contexto de la empresa, los profesionales deben apostar de forma personal por reciclar y revisar sus conocimientos, aptitudes y habilidades profesionales para afrontar su futuro laboral con seguridad y preparación suficiente para alcanzar el éxito.
Una confirmación de que las habilidades anteriormente señaladas son las que se requieren para acceder al mercado profesional con mayores probabilidades de éxito, es la opinión de profesionales que apostaron por una formación de calidad en un centro de reconocido prestigio como es el caso de la Cámara de Comercio de Valencia. La experiencia de haber cursado un MBA Executive en su prestigiosa Escuela de Negocios, les ha permitido desarrollar de forma práctica sus capacidades y habilidades para la dirección y gestión empresarial y agregar un alto valor a su perfil profesional.