Muchas veces se confunden las figuras de jefe y líder; y lo cierto es que no tienen nada que ver. Al jefe le hace falta recordar constantemente a sus empleados que él es la figura principal de la compañía y que es él quien manda. Sin embargo, al líder no le hace falta recordar porque ya le tienen como un modelo a seguir y sabe muy bien cuál es su rol.
La motivación de compartir este artículo, obedece principalmente al hecho de destacar algunas de las características fundamentales junto a otros consejos que se transmiten e inculcan a los alumnos del MBA en Valencia con el objetivo de desarrollar habilidades y aptitudes para ejercer un liderazgo eficaz al frente de sus equipos y empresas que dirigen. A continuación, se presenta una descripción de los factores que hacen a un líder:
Se el mejor ejemplo
Una de las características indispensables de un buen líder es que sea capaz de actuar y no sólo de hablar. ¿De qué te sirve decir a todos tus empleados que el horario de llegada a la oficina deben ser las ocho de la mañana cuando tú llegas a las ocho y media? ¡Predica con el ejemplo!
Comunicación eficiente
Para un líder la capacidad de comunicación es fundamental. No se trata únicamente de ser capaz de comunicarse de manera eficaz tanto de manera hablada como escrita, sino también de escuchar. Es importante recordar que la comunicación tiene dos sentidos; por lo tanto, un buen líder debe saber exprimir al máximo ambos.
Participación
Un buen líder debe ser capaz de involucrar a todos los integrantes de su equipo de trabajo de manera activa; las técnicas de liderazgo más innovadoras indican que es recomendable crear dinámicas en las cuales los empleados puedan participar en el desarrollo de nuevos proyectos.
Confianza
La confianza es clave para cualquier líder; una figura que debe mostrarse como un referente para los integrantes de su equipo de trabajo, en la cual se puede confiar.
Negociación
La capacidad de negociación es prácticamente indispensable para un buen líder. Nadie tiene nunca la verdad absoluta; por lo tanto, hay que aceptar las opiniones de los integrantes del equipo y ser capaz de negociar con ellos hasta alcanzar un acuerdo.
Motivación
Nadie puede ser un buen líder si no es capaz de motivar a su equipo de trabajo; animar a los empleados para que alcancen un objetivo común y se sientan integrados en la empresa.
Reconocimiento
Un buen líder debe tener muy claro que el reconocimiento ante el trabajo bien hecho es muy valorado por los trabajadores. El reconocimiento no siempre tiene que ser en forma de recompensa económica; hay otros factores que pueden ser incluso más motivadores que el dinero: facilidad para conciliar la vida laboral y familiar, flexibilidad horaria, mayor grado de autonomía, etc…
Buen ambiente laboral
Ser capaz de crear un excelente ambiente laboral es una característica de un buen líder. A nadie le gusta trabajar en una empresa cargada de tensión y malas relaciones con los compañeros. Por lo tanto, el papel del líder es clave para evitarlo; debe estar muy atento ante los posibles roces que puedan surgir entre empleados y, de darse, eliminarlos de raíz.
¿Estás preparado como líder para enfrentar desafíos del mundo empresarial?