Qué es y cómo se calcula el apalancamiento financiero

Apalancamiento financiero: ¿qué es y cómo se calcula?

Uno de los conceptos más reiterados en el mundo empresarial es el de apalancamiento financiero. A pesar de ser un término en auge para muchos su significado no está del todo claro.

En este post exponemos qué es el apalancamiento financiero, cómo funciona y cómo calcularlo. Conocer y manejar a fondo este término, como lo hacen los alumnos del MBA en Valencia organizado por la Cámara de Comercio, puede aportar rentabilidad a tu proyecto empresarial.

¿Qué es el apalancamiento financiero?

La primera imagen que puede venir a la mente cuando se habla de apalancamiento es la de una persona elevando un peso con la ayuda de una palanca. En realidad, esta imagen tiene bastante que ver con el apalancamiento financiero donde el instrumento que actúa como palanca son los mecanismos financieros.

En definitiva, se utiliza el apalancamiento como herramienta para conseguir algo de forma más rápida. Tal y como apunta el inversor estadounidense Robert Kiyosaki, el apalancamiento se define en “hacer más con menos”.

Profundizando en el concepto, el apalancamiento financiero consiste en emplear el endeudamiento para financiar una determinada operación en vez de llevarla a cabo únicamente con fondos propios. A través del apalancamiento financiero la inversión se lleva adelante utilizando fondos propios y un crédito.

El apalancamiento financiero puede ser positivo, negativo o neutro en función del “efecto o incidencia que el endeudamiento provoque en la rentabilidad financiera”, según explica Emilio Gironella en la revista Contabilidad y Dirección (2005).

A continuación, exponemos ejemplos de una operación de compra de acciones en bolsa por 100.000 euros con diferente endeudamiento para clarificar el concepto.

Operación sin apalancamiento financiero

Realizamos la operación en bolsa con la compra de un paquete de acciones con 100.000 euros propios. Al cabo de un año, vendemos esas acciones por un valor de 150.000 euros. La rentabilidad obtenida ha sido del 50%.

Operación con apalancamiento financiero positivo

Para la compra de las acciones se han invertido 20.000 euros de fondos propios y 80.000 de un crédito bancario a una tasa de interés del 10% anual. En este caso el nivel de apalancamiento ha sido de 1:4 (por cada euro propio el banco ha prestado 4). Al cabo de un año las acciones se venden por 150.000 euros.

Los resultados obtenidos son los siguientes: se devuelven 88.000 euros al banco por el crédito y los intereses; y se recogen los 20.000 euros de capital inicial propio. 150.000 – 88.000 – 20.000 = 42.000. El resultado restante sería de 42.000 euros y una rentabilidad del 210%. Con una inversión propia de 20.000 euros se ha generado un beneficio de 42.000 euros.

En este caso se trataría de un apalancamiento financiero positivo con ganancias, dado que “el aumento en el nivel de endeudamiento ha aumentado la rentabilidad financiera de la empresa” (Emilio Gironella, 2005).

Operación con apalancamiento financiero negativo

Al igual que en el supuesto anterior, se realiza la inversión de 100.000 euros con 20.000 euros de fondos propios y 80.000 de préstamo bancario con interés del 10% anual. Tras un año, las acciones no se han revalorizado y su valor ha bajado a 80.000 euros.

El siguiente paso es devolver al banco los 80.000 euros prestados más los 8.000 euros de intereses. Al no poder afrontar el pago de los intereses se cae en la insolvencia. El resultado sería la pérdida de toda la inversión y una deuda de 8.000 euros.

El apalancamiento financiero en este caso ha sido negativo dado que el aumento en el nivel de endeudamiento ha sido improductivo para la empresa.

¿Cómo calcular el apalancamiento financiero?

El apalancamiento financiero de una operación se puede calcular de acuerdo a la siguiente fórmula:

Fórmula apalancamiento financiero

BAT: Beneficio antes de impuestos.  BAII: Beneficio antes de intereses e impuestos.

Cuando el resultado del cálculo del apalancamiento financiero es mayor a 1 conviene financiarse a través de deuda. En caso de que el resultado sea menor de 1 no es conveniente apalancarse ya que el endeudamiento no aumenta la rentabilidad financiera.

Ventajas y desventajas del apalancamiento financiero

El apalancamiento financiero permite financiar determinadas compras de activos sin poseer el total del importe de la operación en ese momento. A través de la deuda se puede incrementar la rentabilidad del capital propio. Esta es una de las grandes ventajas que tiene para las empresas.

Sin embargo, si el apalancamiento financiero se maneja con un criterio de inversión deficiente y la operación sale mal, puede conllevar la insolvencia de la empresa.

Tal y como se ha comprobado en los ejemplos, el apalancamiento financiero al igual que multiplica la rentabilidad, multiplica las pérdidas. Es, por tanto, un acelerador de ganancias o de pérdidas; y jugará a favor o en contra en función del criterio de inversión que se tenga. Por este motivo, es recomendable que el nivel de apalancamiento sea acorde al nivel de riesgos que el empresario pueda asumir.

El apalancamiento financiero es una herramienta poderosa que todo empresario debe conocer ya que puede traer beneficios. Siempre debe utilizarse de forma moderada y de acuerdo a un plan estratégico de inversión para garantizar un resultado óptimo.